La pandemia de COVID-19 aceleró la aparición del modelo de trabajo híbrido a una velocidad sin precedentes, con trabajadores enteros distribuidos casi de la noche a la mañana. Pero dar a las personas acceso a la tecnología es solo el primer paso para convertirse en una organización híbrida digitalmente ágil. La tecnología en sí es la parte fácil. Ahora, las organizaciones se enfrentan a un nuevo desafío: cómo medir y comprender los aspectos positivos y negativos del trabajo híbrido, y su impacto final en el éxito empresarial.
Pocas organizaciones han hecho un balance de cómo les va a los empleados cuando trabajan de manera flexible, a pesar de que el modelo ha llegado para quedarse. Las empresas pueden obtener resultados mucho mejores del trabajo híbrido al capacitar a los empleados para que sean tan efectivos como puedan ser. El énfasis de TI debe estar en asegurarse de que la tecnología ayude en lugar de obstaculizar a los trabajadores híbridos, pero en este momento eso no siempre es fácil. Incluso si han establecido los objetivos correctos, las organizaciones pueden carecer de información sobre cómo los usuarios interactúan con su hardware y software. Sin esta visión, los líderes no pueden detectar puntos de fricción en la experiencia del usuario híbrido. Como resultado, pierden oportunidades para agilizar los procesos y mejorar el éxito de los empleados.
Además, es posible que los líderes sénior y los equipos de recursos humanos no notan signos de que una infraestructura y aplicaciones mal diseñada, y una falta de soporte, están perjudicando el bienestar de los empleados. Las prácticas de trabajo ineficientes ejercen presión sobre el personal que trata de equilibrar las demandas del trabajo mientras se mueve entre el hogar y la oficina. Los empleados pueden, por ejemplo, estar dedicando jornadas de trabajo más largas para compensar los sistemas inadecuados o sentirse aislados de sus colegas si carecen de las soluciones de colaboración adecuadas. Estos factores pueden tener un impacto significativo en los equipos’ la salud, que inevitablemente conduce a una salida de talento clave si los problemas no se abordan, con un efecto en cadena para los resultados de la empresa.
Para comprender realmente cómo el desafío del trabajo híbrido afecta a una organización, los equipos de TI y recursos humanos deben centrarse en responder a dos conjuntos de preguntas sobre el trabajo híbrido:
Sin las respuestas a estas preguntas, las organizaciones no pueden saber si las inversiones considerables que muchos han hecho en iniciativas de lugares de trabajo digitales están rindiendo frutos. Las empresas están gastando mucho en proporcionar a los trabajadores híbridos acceso a la colaboración en equipo, el uso compartido de archivos, las conferencias web, la telefonía, los escritorios virtuales y el acceso remoto, sin evaluar cómo está cambiando la experiencia general de los empleados y cómo se puede optimizar.
Evaluar con precisión cómo es el viaje digital del día a día “sobre el terreno” requiere un enfoque sofisticado para triangular la experiencia. Esto incluye la recopilación de datos de activos de tecnología física como una computadora portátil o tableta, hasta el software en ese dispositivo, hasta poder comprender el patrón de trabajo de una persona y cómo interactúan con colegas, tecnología y sistemas. Para obtener más información sobre cómo medir la experiencia de los empleados y abordar el desafío del trabajo híbrido para los empleadores, consulte nuestro nuevo guía para el trabajo híbrido.